Sobre la Ponta do Bode
Situada en la vertiente norte de la parroquia de Caniçal, la Ponta do Bode es un ecosistema protegido con características únicas. El color rojizo que domina todo el entorno le confiere una atmósfera casi mística. Por esta razón, esta zona es comúnmente llamada el «Marte de Madeira».
El nombre «Ponta do Bode» proviene de una leyenda local sobre un animal que cayó accidentalmente en los acantilados de esta zona. Este nombre aparece en los mapas de la región de finales del siglo XIX.
Este es uno de los lugares más peculiares y apreciados del municipio de Machico, por su inimitable paisaje natural, por supuesto, pero también por la importancia de su geodiversidad. Se señala como uno de los ejemplos más importantes de los procesos geológicos de la sedimentología y la estratigrafía, por lo que se compone de dos geositios distintos.
El primer geositio de Ponta do Bode se caracteriza por ser el lugar donde emerge el Complejo Volcánico Superior. Es, por tanto, el mejor lugar de la isla para observar el fenómeno de la disyunción esferoidal. Por su parte, el segundo geositio, incluido en la Red Natura 2000 y en el Monumento Natural de Ponta de S. Lourenço, permite la observación de un complejo de «diques en diques», correspondiente a la zona de fisuras volcánicas.
La Ponta do Bode, en el lado norte de la parroquia de Caniçal, tiene un entorno único con tonos rojizos. Es muy apreciada por su paisaje y su importante geodiversidad.