Fauna y flora de Madeira
Fauna y flora de Madeira
El archipiélago conserva en su territorio un sorprendente patrimonio biológico, que se revela en la extensa diversidad de la flora y la fauna de Madeira. Debido a la especificidad de sus condiciones, como el clima subtropical resultante de la privilegiada situación geográfica, esta región se considera un centro ineludible de biodiversidad.
La fauna de Madeira es extremadamente rica, tanto en lo que respecta a los vertebrados como a los invertebrados. Este patrimonio biológico, en el que destacan las numerosas especies endémicas del archipiélago, tiene un gran interés científico, además de ser de gran importancia desde el punto de vista de la conservación.
A su vez, la flora de Madeira, en estrecha relación con la de la región de la Macaronesia (formada por los archipiélagos de Madeira, Azores, Canarias y Cabo Verde), reúne comunidades vegetales y especies únicas en el mundo. En este capítulo, el protagonismo se lo lleva sin duda la laurisilva autóctona, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Este bosque se caracteriza por su densidad de vegetación, marcada por la presencia de grandes árboles, en su mayoría pertenecientes a la familia de las lauráceas. Sin embargo, la diversidad de la flora de Madeira es impresionante en todo el archipiélago, desde la costa marina hasta las montañas más altas.
Venga a explorar los encantos de la flora y la fauna de Madeira.
Fauna
Fauna y flora
Fauna
Entre el limitado número de especies de aves que se pueden observar en la fauna de Madeira, con un alto nivel de endemismo, hay algunas que merecen ser destacadas. Es el caso de la paloma torcaz o de Madeira (Columba trocaz), el reyezuelo de Madeira (Regulus madeirenses) o el pinzón de Madeira (Fringilla coleeis madeirensis), animales simbólicos del bosque de laurisilva.
En el macizo montañoso, el petrel de Madeira (Pterodroma madeira) destaca como especie gravemente amenazada. A su vez, el gran número de aves marinas que anidan en este territorio insular es también bastante extenso.
Por último, es importante destacar la enorme diversidad de invertebrados terrestres que forman parte de la fauna de Madeira, así como su deslumbrante biodiversidad marina.
Flora
Fauna y flora
Flora
La situación geográfica de Madeira, su clima subtropical y su accidentada orografía permiten la existencia de una gran diversidad de hábitats y, en consecuencia, una elevada riqueza.
En el bosque de laurisilva, ex libris de la flora de Madeira, hay grandes árboles, como el tilo de Madeira (Ocotea foetens) o el laurel (Laurus novocanariensis), pero también abundancia de arbustos, helechos, musgos, líquenes y otras plantas pequeñas.
En el macizo montañoso, la cubierta vegetal se caracteriza por la presencia de plantas como la violeta de Madeira (Viola paradoxa) o el brezo de Madeira (Erica madeirenses), que contribuyen a la imprescindible captación de agua a través de las precipitaciones ocultas.