Mirador del Jardín Botánico

Madeira es famosa en todo el mundo por ser una isla en la que reina la naturaleza, tropical y exuberante. En el mirador del Jardín Botánico, los visitantes tienen la oportunidad de rodearse de un universo natural diverso y dinámico, mientras disfrutan de un paisaje marcado por el mar, las montañas y, entre ellos, la ciudad de Funchal.

El mirador del Jardín Botánico fue creado en la Quinta do Bom Sucesso, construida en 1881 por la familia Reid. Se abrió al público en 1960, con una superficie de aproximadamente 8 hectáreas. De ellas, unas cinco son zonas ajardinadas, y albergan un sinfín de especies de árboles y arbustos ornamentales. Hay más de 2000 plantas exóticas de todos los continentes, algunas de ellas en peligro de extinción en sus lugares de origen.

También cuenta con una zona de orquídeas y de césped, un anfiteatro y una zona de investigación y conservación. Sin embargo, en este espacio verde, el mirador del Jardín Botánico de Madeira adquiere un protagonismo indiscutible. Situado a unos 3 km del centro de Funchal, en lo alto de la orilla izquierda de la Ribeira de João Gomes, ofrece una vista panorámica completa de la ciudad: un mosaico de colores salpicado por el mar y, por supuesto, la vegetación.